Mi primera vez con el Tarot: Cortar el hilo inconsciente, terminar con el patrón, descubrirse, alma vieja, alma joven, alma nómada.

Decidí consultar con una tarotista no para saber el futuro, sino porque sabía que necesitaba desconectar el último filamento en mi parte inconsciente para terminar de dar muerte a esa tormentosa «no relación». A nivel consciente estaba todo hecho, corté los hilos del titiritero hace más de un mes pero tan violento e inesperado fue su descarte que mi inconsciente no terminó de procesar y de romper con aquello.

Al haberme dado cuenta de la potente herramienta que el Tarot representa, habiendo comenzado a leer las cartas por cuenta propia por un conjunto de casualidades, nada casuales (El Tarot y el inconsciente: Desmitificando¿Cómo llegar hasta el fondo de uno mismo? Lo dijo C.Gustav Jung) me dirigí hacia una profesional solo para que me dijera aquello que quería oír y que además verbalicé.

– Vengo a que me digas que esta persona no es buena para mí, que no es para mí y que, si bien es cierto que ha despertado en mí algo profundamente anudado, necesito que mi cuerpo deje de necesitarlo. Es una rémora que no me deja avanzar. Nunca he sentido esta conexión con nadie. Es algo que no te puedo explicar, como si llevara a esa persona cosida a las entrañas. No pasó nada y pasó un mundo y jamás de los jamases sentí nada similar. Tanto es así, que pensé que el tipo estaba loco y era un psicópata manipulador. Obviamente sé que ha habido manipulación emocional si no yo no estaría así de enganchada, pero se dijo tanto, fueron tantas las semejanzas… Es imposible mangonear ni programar por muy estratega que seas.

– Bueno, a lo mejor se trata de una llama gemela.

– No sé qué es eso, pero dudo mucho que algo gemelo te deje tirada como una mierda tal como hizo él en cuestión de minutos.

– A veces sí, suele pasar con las llamas gemelas. Se acojonó porque ibas a ir a verle.

– Sí, hasta ahí lo puedo entender, pero mi cerebro no procesa el saber a nivel lógico y créeme, me da igual, sólo quiero que mi inconsciente rompa con esta conexión. Hay días en los que me levanto bien y otros, como hoy, en los que me muero por dentro. Resuena tan fuerte que no me puedo desprender. Es como una identidad. Gracias a ese descarte fui capaz de ver lo que me mantenía dependiendo emocionalmente de las personas, fuesen quiénes fueran. Lo he integrado y ahora tengo que soltar a todos los niveles.

La señora me pidió una foto del susodicho y, a partir de ahí se obró el milagro. La mujer no hizo magia. Mi entorno me había estado avisando, probablemente porque yo comunicaba zozobra y un azoramiento que no me sentaban bien. Mi calma mental perturbada era obvia para todo el mundo.

Me habló de almas jóvenes que se pierden, de antiguos brujos que se vuelven locos, de almas viejas cuyo ego está muy limado, de comprensión universal, de mensajes de «los de arriba», de la intuición y de tantas otras cosas, algunas me hicieron llorar porque comprendí, y todavía no sé cómo, lo que me había estado acompañando durante toda la vida. Comprendí también una relación en particular que tuve con otra alma vieja, probablemente mucho más vieja que la mía y que ya sabía intuitivamente todo esto que yo he descubierto recientemente. Comprendí también que nadie nos puede transmitir el saber, sino que uno tiene que transitar a través del dolor y del sufrimiento para despertar la conciencia ancestral y acaparar sabiduría para hallar aquello a lo que ha venido a este mundo.

Me consoló saber que la persona en cuestión no estaba enferma, cosa que tranquilizó mis ánimos y que agradecí profundamente a «los de arriba» sin haberlos conocido nunca. Agradecí que se tratara solo de una mentira para cobijar su miedo y su cobardía. Me confirmó que yo estaba bien de salud porque a parte de mi susto universal hará un mes, he estado teniendo episodios de somatizaciones raras que no había tenido nunca. Es como si el cosmos estuviera revolucionado y tuviera ganas de ponerme trabas físicas para atraer mi atención.

-El chico no tiene nada físicamente, solo miedo y una relación. Vive con alguien.

-Sí, eso lo sé. Estoy segura que está con alguien, pero no entiendo por qué necesitaba empezar algo más. Tampoco importa, ya está, cada uno tiene que aprender. No he venido a comprender, he venido a cortar y a perdonar. ¿Puedes seccionar ese hilo que me une a él? Ya he aprendido lo que tenía que aprender, deseo que le vaya bien, inexplicablemente le quiero como si fuera yo misma. Necesito liberarme de esto.

-Sí, no te preocupes, ya está sanado, acabo de tumbar su figura. Te sentirás mejor en unos días.

A la mañana siguiente, ayer, me levanté como si todo hubiera sido una pesadilla, como si los últimos cuatro meses no hubieran sido reales. Siento una profunda paz interior, como si se me hubiera descargado un archivo de sabiduría en el cuerpo. El Tarot a parte de decirme muchas cosas sobre mí misma, que voy a poner en duda hasta que se comprueben y las viva en carne propia, me liberó de esa persona que vino para matar, ahora lo sé, los últimos resquicios de herida terrenal. Siento como si mi vida material, mi ego, se hubieran terminado y estuviera en otro momento vital en una dimensión pseudo conocida.

Un remanso de calma, un bancal de tranquilidad, un entusiasmo controlado, un deseo de hacerme el bien y de hacerlo a todas estas nuevas personas que me rodean y con las que tengo una conexión profunda a varios niveles. Es el momento de vivir aquello para lo que vine, eso que ya me dijeron hace casi veinte años. He terminado el trabajo de purga y perdón de mis ancestros, esa era la primera de las tareas. He descubierto la razón de mi presencia en la tierra, esa era la segunda. Ahora comienza la vida espiritual de verdad y me queda un viaje pendiente a ese lugar en el mundo al que no fui y al que sé que tengo que ir. Ya pronto y de vacaciones. Me lo dijo la tarotista y justo dos horas antes de la sesión una amiga del alma me pidió de hacer un viaje en coche. Vamos… como he dicho, hay cosas que no se pueden programar. Escéptica o no, que todo vaya fluyendo.

Gracias, tú siempre lo supiste. Yo anduve muy perdida, pero por fin tengo el anclaje que no depende de nadie más que de mí misma. Ahora lo entiendo, sin ayuda.

Anuncio publicitario

5 comentarios en “Mi primera vez con el Tarot: Cortar el hilo inconsciente, terminar con el patrón, descubrirse, alma vieja, alma joven, alma nómada.

    1. elrefugiodelasceta dice:

      Hey Joan! Muchas gracias por la recomendación de libro. Obviamente me pongo ya mismo a buscarlo. La verdad es que sí que es efectivo aunque me dejó con ciertas dudas respecto al lazo en sí. Supongo que habrá que seguir transitando y ya se verá. La verdad no está ahí fuera sino dentro de uno mismo!
      Un saludo!!!!

      Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s