Todo dejó de tener sentido: La realidad nada realista de las urbes frente al abrazo de la naturaleza.

Estábamos la montaña y yo, cara a cara, en una actitud nada desafiante por su parte, hostil por la mía, como no podía ser de otro modo. Mi antigua «yo» hizo aparición. La Naturaleza puede ciertamente borrarnos de un suspiro y, allí, frente a la majestuosidad del paraje, sentí que toda mi vida estaba fuera de lugar, nada tenía sentido en aquel momento. Apocada, me sentí lo que era: nimia, prescindible. Un baño de humildad se impuso sin pedir nada a cambio.

La impetuosidad del yo siempre arremetía cuando se las veía con entes del mismo calibre, pero ante la clara superioridad de lo que apenas muestra su fuerza, el humano beligerante como lo había sido yo, se sentía ridículo, mermado y totalmente fuera de lugar. ¿En qué momento nos convencieron de la importancia de uno mismo? Joder, qué estupidez esta visión marcial de la existencia. En mi vocabulario todo había sido pugna, lucha, llamas, fuego, agresividad, supervivencia, acusaciones para mantener en marcha la máquina de guerra.

Da igual el número de libros de filosofía tao, budista, oriental, occidental, pajera mental. No importaba, nada importaba ya. La verdadera sabiduría me la estaba dando la calma y la paz circundantes. Allí no había combate alguno ni batalla por nada, sino un inapreciable fluir, un ser y estar allí con la consciencia de que, la única y mejor cosa que podría hacer en esta vida es rendirme y dejar de querer comprender.

Estar y ser, ambos en uno, sin miedo a la muerte, pues llegaría. Sin temor al rechazo, no existía más que en mi mente. La naturaleza me abrazaba, igual que la hiedra abrazaba al árbol.

Se estaba fraguando un plan de salida… mierda… esta vez, no obstante, la cabra tiraba al monte y mi interior hacia el interior.

9 comentarios en “Todo dejó de tener sentido: La realidad nada realista de las urbes frente al abrazo de la naturaleza.

  1. Avatar de JascNet
    JascNet dice:

    Hola, Montse.
    Buscar en la naturaleza la serenidad, la comunicación con el yo interior y terapia suele ser más efectivo y, sobre todo, más barato que hartarse de sesiones con un psicólogo, o un psiquiatra. Además, los árboles guardan mejor los secretos. 😉
    Me he dado cuenta de que llevo demasiado tiempo sin tirar al monte. Al tener la playita cerquita me olvido de los árboles.
    Espero que te vayan bien las sesiones de natuterapias.
    Abraazooo

    Le gusta a 1 persona

    1. Avatar de elrefugiodelasceta
      elrefugiodelasceta dice:

      Hola Jose! Pues aquí lo mismo, con la playa tan cerca uno acaba olvidando que hay maravillas a dos pasos de nosotros. Solo hay que alargar el brazo para que sean nuestras. Y si no se arrancan… serán de todos!
      Tenemos un país asombrosamente rico y hermoso!
      Abrazooooooo!!!!!!!!

      Le gusta a 1 persona

    1. Avatar de elrefugiodelasceta
      elrefugiodelasceta dice:

      Hola Artista! Ay! Qué te voy a contar que no sepas ya… si eres tú el de las fotos a los acantilados. Maravillosas fotos que nos llevan a un viaje fuera del tiempo y del espacio!

      Me gusta

Replica a JascNet Cancelar la respuesta