«Tengo que estar dispuesto a abandonar lo que soy para convertirme en lo que quiero ser»
– Albert Einstein –
Previously La búsqueda de pareja (1): El vínculo afectivo como el porqué de la necesidad.
En el post anterior se vio cómo el ser humano tenía la necesidad biológica de vinculación, no la de estar emparejado y que, por lo tanto, el desarrollo del apego era algo natural.
La búsqueda de vinculación se traducía en cuestiones culturales y por instinto propio a la pareja sin que realmente pareja = vinculación.
La segunda de las razones por las cuales los seres humanos buscamos a nuestra «media naranja» es puramente cultural, esto es: el ideal romántico.
2. EL IDEAL ROMÁNTICO
A veces la NECESIDAD de emparejarse proviene de una idea romántica inculcada, embutida que diría Jodorowski, con la que hemos crecido. Así sea en nuestra familia o bien en los millones de cuentos, Disney o no, con los que nos bombardearon a todos de pequeños.
En los medios de comunicación, en las películas y series, parece que la vida tenga que ser mejor en pareja. Lamentablemente o no, si existen estos productos es porque tienen una salida comercial, es decir que venden. Y venden desde la necesidad de los televidentes y de todas esta soledad que causa estragos en los unos y beneficios en los otros.
¿Qué fue primero el huevo o la gallina? Supongo que el resultado trata de una retroalimentación. La necesidad de vinculación junto a los cuentos conduce a este ideal romántico que ha fraguado en el inconsciente colectivo y del que después se alimentan carroñeros de todo tipo, manipulando el anhelo, la necesidad y la esperanza (que es lo último que se pierde y por ella absurdidades se siguen cometiendo).
Hay una idealización romántica de lo que es una relación de pareja y eso nos lleva a creer que la necesitamos realmente y CONFUNDIMOS esa necesidad romántica (irreal y creada) con la necesidad de apego (real y biológica) como si fueran lo mismo y NO LO SON. La necesidad de un vínculo de apego no tiene nada que ver con el romanticismo.
Esta IDEALIZACIÓN ROMÁNTICA nos induce a confusión. Confusión con la necesidad REAL de vinculación y después, una vez en relación, nos lleva a confundir dentro de la misma relación las expectativas del ideal. Esperamos que dentro de la relación sea todo fantástico y maravilloso, que vaya todo bien y luego no es así y se genera una ansiedad por el tema del apego.
La idealización romántica hace que no nos adaptemos a una relación romántica cuando se normaliza. Cuando la fase de la luna de miel pasa y empezamos a descubrir al otro en su realidad, cuando caen las máscaras del ego o se empiezan a vislumbrar el humillo negro de ese ser que nos imaginamos perfecto (se tardan unos dos meses aproximadamente en empezar a volver a respirar normalmente). Es entonces cuando cae el telón en las películas y se hace el fundido a negro. Es a partir de aquí, cuando ambos se han visto los personajes y las máscaras caen, que es posible construir una relación real basada en lo que queda de la persona.
Aún así, el primer impacto se mantiene hasta los dos años aproximadamente. La idea de lo que pensábamos que iba a ser prevalece hasta comprobar en reiteradas ocasiones que lo que tenemos no es lo que proyectábamos. O bien terminamos con la disonancia cognitiva poniendo fin a la relación, o bien reajustamos la relación si pensamos que lo que tenemos merece la pena.
En el primer caso, la divergencia de caminos nos hace poner punto y final al tiempo junto a esa persona. En el segundo caso, se impone la necesidad de diálogo, de exposición, de trabajo por encima de la rutina y del tedio propio.
Más nos vale haber elegido a no solo una persona íntegra que nos hablará sin tapujos sobre lo que ella esperaba de nosotros, que sepa ser adulto y responsable en estos momentos y exponerse a sí mismo. Más nos vale tener a alguien trabajado o por lo menos en disposición de trabajarse sus heridas y que nada de cuanto podamos decir será tomado personalmente. Más nos vale haber hecho nosotros mismos la tarea de conocernos y reconocer cuándo estamos siendo niños heridos y cuándo estamos siendo razonables. No siempre es fácil a pesar de los años de terapia, constelaciones familiares, sesiones de lo que sea. Es, asimismo, importante que la persona con la que mantengamos una relación tenga la imaginación suficiente para darle un vuelco a la realidad y ayudarnos a desviar la rutina sin por ello quebrar la armonía.
¿Es esto una idealización de la pareja o asumir que la vida es larga y que no siempre será luna de miel? No podemos responsabilizar o esperar que la pareja cubra nuestras necesidades de apego, sin embargo, tener una idea clara de nuestros límites, de lo tolerable, lo deseable, lo innegociable, lo absurdo, etc. nos ayudará a no equivocarnos tanto a la hora de elegir. Nadie más que nosotros debe ser responsable de cubrir nuestras necesidades de apego.
Hay personas y personas, no obstante. Ser conscientes de nuestro tipo de apego (ambivalente, desorganizado o evitativo) nos ayudará a explicarle a la persona lo que nos ocurre cuando se dispare la necesidad o bien la huida.
En definitiva, estar en equipo no es un cuento, ni mucho menos.
Haces reflexiones interesantes que no tienen solución, o al menos una solución fácil… Cuando tienes pareja pasas por momentos en que piensas que estarías mejor sin nadie, y cuando estas sin nadie… pues eso…
El problema es lo que comentas, la idealización, el no tomar las decisiones en función de lo que queramos, sino en función de lo que nos han hecho creer.. ¿cuántas de nuestras ideas son nuestras?, ¿hemos elegido el camino o alguien lo pintó en el suelo y lo llenó de señales de aviso y precaución?
Y luego, lo otro que dices, cuando idealizas algo es complicado romperlo. Si has encontrado al amor verdadero, al único y verdadero, ¿cómo no aguantar ciertas cosas?…
Pues eso, no hay respuestas… desconfía de quien tenga respuestas, viaja ligera 😉
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Buenas! Gracias por tus palabras y aportar valor siempre.
Pues la verdad es que son estas preguntas las más frecuentes cuando indagas en la vida de la gente. Los que tienen pareja la tienen porque «mira… » pero cuando preguntas «¿Qué te gusta tanto de esta persona?» no saben contestar. Creo que para contestar uno tiene primero que conocerse a sí mismo porque lo quen engancha de las personas son aquellos puntos que nos fallan a nosotros, es solo mi opinión. Por ejemplo si te sientes inseguro, te atrapará la seguridad (al menos la apariencia de seguridad), si te sientes pobre o que se te valora más por lo que tienes que por lo que eres… pues te atraerán aquellos que te sabrán sostener económicamente… etc etc etc.
Es decir que la primera imagen a erradicar es la propia concepción de nosotros mismos, nuestra creencias limitantes de lo que somos, o no somos, de lo que valemos o no valemos. Es muy difícil terminar con esta imagen, creo que se puede tardar toda una vida. Y mientras tanto, ir probando y supongo que terminas quedándote con la persona que te da tranquilidad y paz. Pero bueno, lo dice una casi cuarentona que está hasta el c… de las chuminadas.
Hasta el creer lo que creemos es una falacia así que todo se vuelve un poco complicado porque es como caminar sobre nieve virgen. Menos mal que al cumplir años se te va cayendo todo, hasta la idealización.
De nuevo gracias por pasarte!
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És El Tajo de Ronda, oi? Hi vaig estar fa molts anys. Si és que sí… és realment espectacular.
Molt bona entrada, ja vaig llegir la primera part fa dies i em va semblar brutal. Les dues clarifiquen molt bé les coses, amb una gran lucidesa i valentia, també maduresa emocional. De fet tot el que hauríem d’aplicar les persones un cop estem ficats en una relació de parella.
Més d’acord no podria estar.
És tan com dius… està tot el tema de l’ideal romàntic que ve imposat pels patrons culturals, tot el bombardeig per part del cine, literatura, mitjans… i els valors i idees que semblen predominants en la gent que ens envolta. Com molt bé dius, sembla asumit en termes generals que sempre estaràs millor en parella que sol. Fals en termes absoluts. També hi ha molta gent que no entèn en absolut que la solitud escollida pot ser molt maca, però aquest és un altre tema.
Em sembla clau aquesta part:
«Hay una idealización romántica de lo que es una relación de pareja y eso nos lleva a creer que la necesitamos realmente y CONFUNDIMOS esa necesidad romántica (irreal y creada) con la necesidad de apego (real y biológica) como si fueran lo mismo y NO LO SON. La necesidad de un vínculo de apego no tiene nada que ver con el romanticismo.
Esta IDEALIZACIÓN ROMÁNTICA nos induce a confusión. Confusión con la necesidad REAL de vinculación y después, una vez en relación, nos lleva a confundir dentro de la misma relación las expectativas del ideal».
Com molt bé raones a la primera part, es tracta d’aquesta necessitat humana de vinculació emocional i afectiva, que no és el mateix ni ha de traduir-se per força en una relació de parella. L’amor romàntic, pur ideal, seria «el summum», pero com a ideal no coincideix amb la realitat. I les relacions de parella, amb tot el component emocional, afeccions i la part sexual no són el mateix que aquesta vinculació afectiva ben duta a terme (a vegades es pot).
Considero clau el tema de la idealització, un tema sobre el que he pensat molt… i no només pensat: practicat i viscut, havent tropeçat en la mateixa pedra moltes vegades. Aquesta idealització pot ser malaltissa, insana, nociva, perillosa fins i tot. De fet la trobo, literalment, com una forma molt subtil de violència. Sí, violència mental, en el sentit de que vols forçar la realitat per que sigui com a tu t’agradaria. Forçar a l’altra persona a ser com a tu t’agradaria, com has somiat. És clar, projectem les nostres expectatives, mancances i mil coses més, sense veure a l’altra persona, la real. Aquesta violència per tant és no acceptació, resistència, negativitat, rebuig de la realitat, etc. No sé ni si m’explico ni si estaràs d’acord. Tot això es pot traduir per exemple en frustrar-se o empipar-se per arguments tipus «és que no sent el mateix que jo sento per a ella», o «m’ha decebut ja que no ha fet o no ha dit… «. I mil històries més. Per això caiem en aquest forat negre de retrets, victimisme… i com molt bé dius «sentirse un niño herido», és a dir, les exigències i retrets d’un ego que no es sent prou correspost, entès, estimat. Llavors pots estar dins d’una relació amb una actitud destructiva i tòxica, perquè ho vius des de la carència i no l’abundància, com molt bé raones no recordo on.
Tot aquest «infern» l’he viscut i l’he practicat, sí. Per això dic que és malaltís i que és violència.
Només et portarà a la frustració i la queixa, i molt probablement a la ruptura inevitable.
Per això estimar de veritat és una altra cosa, on acceptes de veritat a l’altra persona i aprens a veure-la tal com és.
I en el fons, saps què penso quan portem aquesta idealització de la persona estimada fins a un límit tan irracional? Que el motiu és perquè en aquella persona ens estem veient a nosaltres mateixos, com una mena de mirall. O almenys esperar trobar la correspondència absoluta de sentiments, i també l’absència de coses que no ens agraden de l’altre.
Molt certa també tota la part final, quan dius «más te vale bla bla bla».
En fi, hem de treballar cadascún de nosaltres aquestes temes si volem de veritat madurar, créixer i ser feliços, i a més independents emocionalment, fins i tot dins d’una relació, encara que no ho siguem al 100%.
Una abraçada.
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No només és que nosaltres no veiem a l’altre pel que és, a vegades l’altre per les seves propies mancances no es mostra tal qual és. És una estupidesa per ambdues bandes. És com les entrevistes de feina, Jo explico una historia, l’altra m’explica una historia i PUM ens trobem en un teatre en que todo parecido con la realidad es pura coincidencia. PFFFF… Admeto que és avorrit i sempre la mateixa historia tantes vegades repetides que ja n’hi ha prou. Prefereixo quedar-me sola que anar a buscar una cosa que no és. De fet la millor part de conèixer a algú és quan ja comences en ensumar-li la merdeta. Ahí, jugosillo.
Qui més, qui menys ha passat per algun dels inferns, si no no podria dir que ha viscut. Ademés, pensa que no veiem a l’altre pel que és ni tampoc pel que mostra sino pel que nosaltres som. «Como es dentro es afuera» i és així. Et fixaràs en allò que t’agrada de tu, llavors en realitat estàs practicant una mena de autoamor. J AJA JA, sí, els demés ens fan de mirall.
Ser independent emocionalment és el més difícil perquè realment has d’anar a buscar la merda més soterrada que tens al fons del fons del fons de l’ànima. És tornar als 2, 3 o 4 anys i prendre consciencia que aquell abandonament, aquell rebuig, aquella injusticia, humil-liació o traició és el que et marca i mata totes les teves relacions. Tot i així, si trobes a la persona adient, crec que és possible fer un treball en equip, és una cosa que no em treurà ningú del cap. Una abraçada!
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Molt bona la primera puntualització: «a vegades l’altre per les seves propies mancances no es mostra tal qual és».
Ja, és que això és molt complicat i aquí és com el joc d’amagar-se però a moltes bandes. I si tu ni ningú es coneix en realitat de forma honesta i profunda, si mai t’has pres la molèstia d’indagar, com collons podem mostrar-nos a l’altre? Impossible. Ni tan sols ens coneixem.
Ja ja ja, m’has fet gràcia. De veritat creus que…
«De fet la millor part de conèixer a algú és quan ja comences en ensumar-li la merdeta»?
No sé, potser, si saps acceptar-ho sense pors ni protestes ni rebuig, etc. També és maco quan estàs enamorat fins a les tranques, al principi, però és clar, estàs vivint dins d’un somni o il·lusió, una mentira, un miratge, fins que comences a obrir els ulls. La part maca és, crec, si saps veure la part maca o lluminosa de l’altra persona, les virtuts, la intel·ligència, encara que li posis idealització per part teva. Perquè fas a aquesta persona d’alguna manera millor, allò de «verte con mis ojos» que deia Frida Kahlo. No creus? A vegades hem de ser més benèvols amb les persones que estimem que el que elles mateixes són amb elles mateixes, capisci?
Sí, és autoamor en molt bona mesura, utilitzar els altres de mirall. Llavors té molt de narcissisme.
En quant a la indepedència emocional, tan difícil, té a veure com dius a saber curar-te de totes les ferides que t’han fet, ja des de molt petit, a la família. Jo en tinc moltes, les vaig observant i curant. M’he fet farts de plorar a aquest respecte. És, com deia el Buda, saber fer-te fort i resistent com una roca. No només mentalment. Interior, emocionalment. No vol dir «una roca impassible» tampoc.
Una abraçada.
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«…No siempre es fácil a pesar de los años de terapia, constelaciones familiares, sesiones de lo que sea…» 🤔
Debes de ser un buen bicho… y lo complicas todo mucho. Pero me gusta cómo lo planteas y cómo lo escribes.
Te felicito Asceta 👌😘
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JAJAJAJA! Soy un buen bicho, en efecto y en defectos de fábrica me ganan solo unos pocos. Con el tiempo se liman asperezas. No complico las cosas es que, por suerte o por desgracia, nací con una mente a la que le gusta perseguir preguntas sin respuestas. Hay cosas peores.
Gracias, nostalgias! Un abrazote!
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🤗
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